Pensamientos saludables, relaciones saludables.
Cuando vives momentos difíciles de repente te asalta un pensamiento gris: «¿Se olvido Dios de mí?».
Sabias que nuestros pensamientos
Influyen lo que sientes y cómo actúas. Esto afecta la manera en que te relacionas.
Un día en el trabajo alguien no te responde el saludo…y piensas:
«No le importo»
¿Como te sientes? ¿Qué actitud tienes hacia esa persona?
Tu esposo no te responde la llamada …piensas:
«Ya no me ama»
¿Que sientes? Que haces?
Tu hijo se porta mal…. Piensas
«Es mi culpa»
Ya sabes… hay una emoción desagradable y una actitud hacia tu hijo que puede ser poco efectiva o no saludable.
Nuestro cerebro maneja cientos de pensamientos por minuto, algunos los identificamos y otros…
la gran mayoría de ellos no logramos captarlos.
Son rápidos, son poderosos y pueden gobernar nuestras emociones y nuestras conductas.
El Dios que nos hizo
Nos dio herramientas para manejar nuestros pensamientos, en su palabra encontramos hermosos versículos como:
“Derribando argumentos y toda altivez que se levanta contra el conocimiento de Dios, y llevando cautivo todo pensamiento a la obediencia a Cristo,”
2 Corintios 10:5 RVR1960
invito a que tomemos algunas semanas para aprender acerca de la importancia de nuestros pensamientos
y su influencia en nuestras relaciones.
